Teletrabajo y el Home Office

A día de hoy, el concepto «home office» ha llegado para quedarse. Cuando todo el mundo habla del teletrabajo, es más importante que nunca saber cómo montar tu «oficina en casa» para poder trabajar y no morir en el intento.

Debemos resaltar, no obstante, que “teletrabajo” no sería la traducción perfecta, ya que el home office es específico para trabajo en casa, mientras el teletrabajo puede ser realizado en diferentes lugares, como un café, un coworking, etc.

teletrabajo

Esta práctica es un gran reto a implementar en muchas empresas por sus grandes ventajas y beneficios, tanto para la misma empresa en reducción de costos, como para los empleados que pueden ser contratados en cualquier parte del mundo, sin limitaciones geográficas. Además, se evitan gastos de tiempo y dinero en alimentación y transporte.

Por otro lado también tiene inconvenientes, ya que mezclas tu ambiente laboral con el personal, tienes niños y/o mascotas correteando y haciendo ruido por los pasillos, etc.

Ventajas del Home Office y del teletrabajo

Flexibilidad y comodidad

La flexibilidad de horarios es una de las mayores ventajas del home office porque después de todo estás organizando tu propio tiempo y tareas si trabajas por objetivos, cosa habitual en estas situaciones. Si tu empresa actúa en horario comercial es importante estar en línea al mismo tiempo en que tus compañeros de trabajo. No obstante, nada impide que, en caso te sientas más productivo por la noche o madrugada, adelantes el trabajo del próximo día en esos periodos.

Además, piensa en el tiempo que ahorras, ya que no será necesario ir y venir de tu lugar de trabajo. Es decir, nada de perder horas en la carretera.

Calidad de vida y economía

Hablando de tiempo ahorrado, éste podrá servir tanto para mejorar tu productividad como para invertir en calidad de vida. Aquí van algunas opciones para las horas libres:

  • Continuar ese proyecto especial (personal o profesional) que dejaste aparcado a un lado.
  • Pasar más tiempo de calidad con la familia, participando más activamente de la vida de los hijos, dando atención a las mascotas, haciendo comida junto a los seres queridos y retomando las conexiones con amigos.
  • Estudiar otro idioma, realizar cursos online, leer libros, ¡son muchas las posibilidades!

Ya sea para los colaboradores o para el negocio, la economía también es significativa cuando se adopta el home office. Son varios los gastos que se pueden reducir, entre estos alimentación, transporte, reducción de desperdicio de recursos, etc.

Sostenibilidad

Así mismo, quedándote en casa estará ayudando al planeta. Con menos personas yendo y viniendo a sus trabajos, habrá menos coches en la calle.

Recomendaciones

Aquí algunos recomendaciones, para una vida profesional exitosa en teletrabajo, dadas por empresas internacionales y lecciones aprendidas de quienes trabajan remotamente:

1. Establece horarios

Al estar en casa, es tentador quedarse más tiempo en la cama o ver una serie en el horario de oficina. Para ser más productivo sin perder el foco, es importante respetar una rutina profesional: levantarse siempre al mismo tiempo, y arreglarse como si fuera a la oficina (bañarse, vestirse, desayunar). Debes intentar tener conectado el chip de la eficiencia en el trabajo igual que si estuvieras en la oficina.

teletrabajo coworking

2. Dispón un espacio para tu oficina en casa

Invierte en un lugar fijo y equipado de trabajo con todo lo que necesitas en el día a día: una silla cómoda, una mesa funcional, material de oficina, wifi, una botella de agua, etcétera. Trabajar en la cama, o en diferentes espacios no establecidos (como el comedor o el sofá) puede ser poco profesional, ya que es más difícil separar cuando estás sólo con tu ordenador conectado, haciendo otra cosa, que cuando estás realmente trabajando. Además, perjudica tu foco de atención. Levantarse a cada instante para buscar algo (un lapicero, agua, papeles, etc) también puede afectar el rendimiento.

3. Haz saber a tu familia y amigos que no estás disponible

Para quien o quienes viven contigo puede ser difícil entender que estás en casa pero no estás de vacaciones y no estás disponible para resolver problemas, hacer compras o ir a tomar una cerveza en la mitad de la tarde. Es necesario dejar claro cuál es tu horario de trabajo y que tu trabajo desde casa, es igual como si estuvieras trabajando de manera presencial en tu empresa.

4. Sal de vez en cuando de casa

Si trabajas desde tu casa, almuerzas en casa, tomas un café en casa y resuelves todo por teléfono, date un respiro y sal. En este modo de vida, existe un alto riesgo de pasar días sin ver la luz del sol. Organiza almuerzos con amigos, toma un café cerca, camina o sal en bicicleta a la calle, resuelve asuntos pendientes personalmente.

5. Si te sientes solo, cambia de ambiente

Si llega un momento en que no eres capaz de seguir trabajando en casa, opta por otros espacios, trabaja en alguna biblioteca municipal, en algún café tranquilo u opta por un coworking si quieres tener contacto con más gente. Se llama teletrabajo porque no dependes de tu ubicación para trabajar.

6. Ejercita tu concentración

Aprovecha para deshacerte de lo que no te gusta del ambiente en la oficina (mucho movimiento, el teléfono sonando, conversaciones en tono alto, reuniones a todas horas) pero cuídate de no reemplazar todo por otras distracciones, como tu sofá, los juegos del móvil,  jugar con tu mascota, Netflix, etc…

7. Organiza tu casa y tu espacio de oficina

Si tu ambiente de trabajo es tu vivienda, necesitas tener la seriedad de oficina. Mantén la casa limpia, las cosas en su lugar y tu escritorio en orden. Perder el tiempo recogiendo o limpiando tu escritorio, va a generar falta de concentración.

8. Finaliza tu día laboral

Al estar en casa, puedes terminar extendiendo tus horas de trabajo (solucionar un mínimo problema, responder a mensajes de correo electrónico) sólo porque ya tienes el ordenador encendido. Cuando las personas sienten que el tiempo les está rindiendo, terminan alargando el día de trabajo ya que la sensación de productividad es buena. Siempre habrá temas que solucionar, pero eso no quiere decir que necesitas resolverlos inmediatamente. Separa lo que es urgente de lo que no es y desconéctate. Tan necesario como la disciplina para empezar el día de trabajo es tener la disciplina para terminarlo, o terminarás trabajando 24 horas sin darte cuenta.

¿Te ha parecido interesante? Puedes consultar conmigo cualquier cosa aquí.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.